lunes, 9 de noviembre de 2009

Te doy una Canción



Quisiera abrir lentamente mis venas
Mi sangre toda vertirla a tus pies
Para poderte demostrar
Que más no puedo amar
y entonces, morir después.

Y sin embargo tus ojos azules
Azul que tienen el cielo y el mar
Viven cerrados para mí
Sin verte estoy así
Perdida en mi soledad


Sombras nada más
Acariciando mis manos
Sombras nada más
en el temblor de mi voz.
Pude ser felíz
y estoy en vida muriendo,
y entre lágrimas viviendo
los pasajes más horrendos
de este drama sin final.
Sombras nada más
entre tu vida y mi vida
Sombras nada más
entre mi amor y tu amor.

Qué breve fue tu presencia en mi hastío
Qué tíbias fueron tus manos y tu voz
Como luciérnaga llegó,
tu luz y disipó las sombras de mi rincón.
Y me quedé como un duende temblando
Sin el azul de tus ojos de mar
Que se han cerrado para mí
Sin verte estoy así
Perdida en mi soledad.


Sombras nada más
Acariciando mis manos
Sombras nada más
en el temblor de mi voz.
Pude ser felíz
y estoy en vida muriendo
y entre lágrimas viviendo
los pasajes más horrendos
de este drama sin final
Sombras nada más
entre tu vida y mi vida
Sombras nada más
entre mi amor y tu amor.


Tantas veces la Cantamos
Entre Risas
Yo tenia sin Embargo
Un Triste Presentimiento

Y Hoy sus palabras
Golpean Mi Realidad

3 comentarios:

  1. Esa cancion es una pasada. Demasiado triste por otra parte.
    Todo pasara y algún dia verás tu vida llena de luces y no de sombras.
    hasta entonces ya sabes donde tienes un amigo.
    Besos

    ResponderEliminar
  2. La Tristeza no es mala, integra el abanico de nuestro sentir interno, se puede estar triste y ser triste , es humano e intensamente pasional; sin la Tristeza Chopin no nos hubiere regalado sus melodías tan bellas como “Tristeza de amor” ni muchos poetas nos inspirarían con sus letras y los músicos esa canción que nos obsequias en su pureza y que es un tango hecho Bolero. Un abrazo

    ResponderEliminar
  3. Gracias Manuel. Tu también tienes una amiga en mí aunque poco puedo darte cuando no soy capaz ni de cuidar de mi misma.

    Augusto. La Tristeza... quiza tengas razón. Tal vez. Pero es una carga demasiado pesada de llevar a veces.Gracias,muchas gracias.
    Tus palabras son casi un bálsamo para mi en dias como hoy.

    ResponderEliminar